EL 5/5/2008, vivía en Barcelona. Estaba solo y extrañaba mucho a mi familia y amigos. Acabo de encontrar algo que escribí ese día.
De por qué escribo...
Y porque estar solo me hace pensar demasiado. Me hace darme cuenta de lo mucho que me falta, de lo mucho que necesito. Se ven las cosas diferentes, por ahí mas claras.
Y porque me hice amigo de mi mismo, y juntos vivimos en una emotiva disputa por ver quien de los dos, es mas protagonista. Porque cuando uno esta mal, el otro consuela. Pero cuando los dos estamos bien, nos esforzamos para pelearnos. Porque juntos nos dimos cuenta que las cosas buenas están en Buenos Aires, que sin todo eso que hoy valoramos, el resto no tiene sentido. Porque encontré en el silencio a un amigo. Y ese amigo me hizo acordar de lo lindo que es a veces, sentarse y pensar.
Porque pensando nos dimos cuenta que para estar bien con el resto, primero hay que encontrarse con uno mismo. Y si me daba miedo estar solo, encontré en mi mismo a ese amigo dispuesto a hacerme compañía.
Y porque me da miedo que al volver, la costumbre me haga olvidar de las cosas en las que hoy no puedo dejar de pensar. Que deje de sentir lo mucho que necesito. Y por eso escribo.
Enrique A. Vidal Bazterrica, Barcelona, 5 de mayo de 2008